miércoles, 19 de octubre de 2016

Mis disculpas.



Por Victoria Chaya Miranda


Hace días me duele el pómulo, como si me hubieran pegado una gran trompada en la intuición, parece que mi emoción llega al síntoma físico de manera cada vez mas clara.

…Levanto el tono cuando la furia me invade, tan incorrecta soy, a eso se le suma una voz grave y fuerte que con volumen elevado es amenazante y cuando me enojo mucho pero mucho, los ojos se me inyectan y se agudizan, cual batalla épica. Mis disculpas por ser ciegamente decidida, por estar segura de mi sexualidad y conocerla, mis disculpas, se que molestan profundamente estos “tonos seguros”  
A la vez ando medio inestable emocionalmente, básicamente mi estado es “un peligro”. Sepan disculpar, es que hoy me levante al unísono de miles, cientos y millones de gritos desde todas las épocas pidiendo auxilio, aquellos que ninguna sociedad escuchó, sepan disculpar mi intolerancia, es que desde que nací camino en un río de sangre de las que me anteceden y me suceden, mis hermanas mayores, y menores. Sepan disculpar que me rebele infinitamente y que lo injusto lo grite y divulgue hasta el hartazgo, es que mi madre desde pequeña me enseñó que los espacios me los debo ganar y que el mundo para las mujeres es mas difícil…También me enseño a no ser esclava de nadie, que en mi profesión estoy yo sola en el centro de la escena de la mano de mi misma y que si algún día siento que mi identidad depende de la aprobación de algún hombre, es que acabo de perderme. Lo siento tanto, es tan incómodo esto de estar poderosamente dolida, es que estoy enlazada a millones de manos perdidas en la atmosfera de impunidad e indiferencia, mis disculpas de verdad, es que hoy, las vi en mi habitación, enlazadas en la ventana y así se armaba una gran cadena de súplicas que recorrían toda la ciudad y que se abrazaban y gritaban de dolor en el parto de un nuevo paradigma que aun no llega. Mis disculpas por mi conmoción e impotencia contenida, es que hoy en el centro porteño cayeron en mi cabeza, las lágrimas de todas las que perdimos, y de todos los cuerpos de las que quiero, las que amo y las que no conozco que han sido vulnerados, ultrajados, violados. Mis disculpas por el odio profundo que siento, es que el 80% de los abusos sexuales están adentro de las familias que se sacan la mejor foto de brindis de fin de año, y el silencio cómplice los ampara. Si, hablo en masculino, ya que alrededor del 99% de asesinos seriales son hombres, si hablo en masculino, por que mas del 80% de los abusos sexuales son perpetrados por hombres, si hablo en masculino por que la mayoría de desastres de la humanidad la iniciaron hombres…Lo siento tanto, mis disculpas por mi cruel palabra interminable, se que da miedo la palabra feminismo, pasa que hoy, el poder de todas las brujas y hermanas de la mano de Artemisa estaban en la plaza, y colmaron la ciudad de negro, ellas estaban ahí, junto a mi, silenciosas, y con la cabeza alta. No estoy psicótica, mis disculpas por ser pasionalmente combativa, es que las mujeres profesionales escalamos nuestros logros con sudor, esfuerzo, tiempo, lagrimas, fracasos, hambre y menores sueldos. Mis disculpas por la molesta insistencia que tengo de insistir, es que nosotras las mujeres nos queremos VIVAS Y UNIDAS. Mis disculpas por mi rotundo NO. No quiero una ley que garantiza el 50% de las mujeres en determinados roles, ya que eso es descalificar la formación y capacidad de toda mujer. Quiero las estadísticas de todos los espacios de participación humana, quiero que la información que en silencio soportamos todas las profesionales acerca de la exclusión y falta de valoración por nuestra formación se sepa, quiero que la estigmatización por ser mujer sea estadística y política del Estado. Mientras tanto, pido profundamente mis disculpas por mi poderoso dolor, a todos los que se sintieron excluidos comprendo que no sepan hacer roles secundarios, el genero masculino estuvo siempre en la gráfica del mundo, y hoy por un rato, fuimos las protagonistas de una fúnebre velada donde todas las épocas nos encontramos... Las revoluciones son dolorosas y llevan tiempo, con dolor te digo: tu compañía es valiosa, pero mas aún es tu silencio. Como el humilde acto de ceder la palabra, no quiero tu opinión del feminismo, quiero tu respetuoso silencio. Mis disculpas, es que nos están matando, y para hablar de igualdad, VIVAS Y UNIDAS NOS QUEREMOS.

Chaya 20/10/2016

martes, 8 de marzo de 2016

La Mujer


8 de marzo del 2016

Yo no tengo nada que festejar, en este día donde miró para atrás a mis cortos medianos largos años, contemplo el presente y  veo que año tras año ser mujer es luchar y luchar y seguir luchando, mientras recibís un par de patadas. Mientras los espacios artísticos se dicen inclusivos los festivales son mares inacabables de testículos y las escasas mujeres que allí aparecemos no podemos ni siquiera representar una mirada grupal, por que de eso se tratan los cambios de paradigma de miradas grupales. Desde ya, hay que fumarse la palabra inclusión repetidas veces como si eso realmente sucediera. Hay muchas mas mujeres artistas de las que salen a la luz, sucede que el 70 % se cansan de luchar. Las oportunidades de progreso entre géneros siguen siendo diferentes y llegamos agotadas a objetivos que el género masculino llega subiendo escalones,  nosotras escalando una montaña de arena y barro que solo con espíritu se atraviesa. No soy ni seré condescendiente con nadie, y menos por ser mujer, no voy a quedarme sonriendo ante un halago, una promesa,  una frase con aire de aliento que en realidad es un deseo de que te detengas. Finalmente quienes tenemos alma de líder en ocasiones convivimos con la mirada de desconfianza que en nombre del sometimiento hablan de ser avasallante, como si tuvieras un problema de energía o algo por el estilo por que las críticas te importan poco y por que sabes que nadie NUNCA te va a regalar nada, sobre todo SI SOS MUJER. No tengo nada que festejar, hoy es un día para recordar a todas las muertas de Juarez a todas las muertas de Oriente a todas las muertas en fábricas, a todas las muertas por violencia de género, a todas nuestras secuestradas, golpeadas y abusadas. Hoy la furia de todas las que no emiten palabra me corre por la sangre, hoy pegaría un grito de dolor que cruce océanos y logra abrazarme con otras luchadoras pares. Hoy mi furia es que sepas que NO HAY NADA QUE FESTEJAR mientras no se replanteen los beneficios del machismo y las conductas patriarcales de esta sociedad. Hoy a mi tu feliz dia me enfurece si ni siquiera podes pararte a juntar la mesa, pero un par de frases pelotudas te convierten en sensible. Hoy no tengo nada que festejar con Milagro presa, Berta Cáceres Flores asesinada y tantas desaparecidas en nombre del sexo. Por mas abrazos entre mujeres y hombres que quieran abrir puertas,  sacarse velos y que tengan ganas de observar que sociedad machista hemos conformado y como podemos cambiarla. AMEN